Los humanos hemos denominado a lo inexplicable bajo muchos apelativos. Como lo verdaderamente inexplicable, por definición no puede explicarse, seguiremos como podamos…
Conceptualiza un tiempo, que no fue tiempo, un lugar, que no fue lugar, y un algo, que no lo fue, pues era nada. Así son todos los Génesis. Con una historia: la de un tiempo que olvidamos y la de otro en la se suceden los ciclos. Al principio, o al final, o entre medio (que no sabemos), surgió lo que era y lo que podría haber sido.
(recombinación muy libre de un texto de ( Miguel Llabata )